CAPITULO VI
El viernes vimos el primer caso, del guarda bosques, veamos el segundo, reflexionemos, el cancer crece sospechosamente cada dia… el sida peligrosamente mas, las “pseudos investigaciones estan infladas, aumenta las estadisticas porque ya es innecesario muchas veces alguna prueba… basta que un paciente se haga reacio a cualquier tratamiento, haya creado anticuerpos contra este, sea neumonía, tbc, o hepatitis, para que sea incluido en el saco de los VIH positivos …!
Segundo caso.
Tras haberse sometido a una prueba voluntaria, un agente de seguros, compañero sin historia de una pareja homosexual, resulta ser seropositivo. ¡Su amigo era negativo! Hasta entonces todavía no había tropezado con un verdadero problema, el universo era para él un lugar tranquilo. Pero ese mismo día se sintió sepultado bajo una avalancha de conflictos. Fue ingresado allí mismo en la sección de aislamiento de un gran hospital. Nadie volvió a tocarle. Su amigo continuó con él durante los primeros momentos pero acabó abandonándole. Sabe muy bien en qué momento desarrolló un SDH: lo habían examinado de pies a cabeza con guantes aislantes, sin encontrarle nada.
Sin embargo, las pruebas detectaban que en su sangre existían anticuerpos anti-VIH, y que el resultado era positivo. Los dos médicos prosiguieron incansablemente sus exámenes. Finalmente, uno de ellos descubrió en la zona interna de la planta del pie derecho una mancha fungiforme, la señaló con el dedo con aire de entendido, y dijo:
- ¡Helo aquí, un sarcoma de Kaposi! Luego los dos doctores examinaron de nuevo a fondo su pene. En el tercer intento acabaron por encontrar una grieta minúscula, de entre uno y dos milímetros.
- ¡Ah!- exclamó el otro doctor- ¡ya ha alcanzado el pene!.
El paciente comentó que entonces se sintió caer en un pozo sin fondo, tenía la sensación de haber quedado apestado, de haberlo perdido todo, su profesión, sus amigos, el sentimiento de su valía. Se sentía particularmente desvalorizado en el plano sexual. A partir de ese momento, y a pesar de las radiaciones de cobalto a que le sometían contra los malvados virus VIH, fue desarrollando un melanoma a partir del pie derecho, síntoma de un conflicto de impurificación. Las manchas de melanoma azul oscuro hicieron también su aparición en el pene, cuello, y a continuación en el otro pie.
¿Estaban pues en lo cierto los médicos? Al contrario, lo que hicieron fue precipitar a este hombre, perfectamente sano, hacia un conflicto de impureza, tal como se puede constatar en el escáner cerebral sobre el corte de su cerebelo (todavía activo). Al mismo tiempo y tras su Síndrome Dirk Hamer, el paciente experimentaba una impotencia cada vez más pronunciada. Todos los carcinomas que fueron sucesivamente haciendo su aparición -el melanoma generalizado, las metástasis óseas, las metástasis de cáncer bronquial, correspondientes a los conflictos ad hoc, iban siendo catalogados como metástasis cancerosas del S.I.D.A.-. Finalmente le informaron de que ya no había terapia para él y lo enviaron a su casa, a morir.
Perdió peso rápidamente y fue víctima de un pánico total.
Aparentemente tenía vida para tan solo unas semanas. Fue entonces cuando -justo a tiempo, por lo que parece- recibió mi libro Fundamento de una Nueva Medicina. Descubrió que el SIDA. es la mayor estafa del siglo, lo que le pareció plausible, claro y evidente. Desde entonces empezó de nuevo a comer, duerme, ha engordado de nuevo y el melanoma ha dejado de extenderse. Tengo esperanzas de que lo supere, y si lo consigue, los demás podrán tener la seguridad de que realmente es la estafa más grande del siglo.
El paciente hubiera enfermado por igual -según la Ley de Hierro del Cáncer- tanto si el test hubiera dado por error un resultado falsamente positivo, como si realmente lo fuera. Lo que cuenta es que él creyó que era grave y mortal, sólo eso cuenta.
Si el paciente no se hubiera sometido voluntariamente a la prueba del S.I.D.A., no le hubiera pasado nada en veinte años, ya que por aquel entonces gozaba de una salud perfecta. Esto es algo que se corresponde con exactitud a todas las observaciones que llevan efectuadas los investigadores: para enfermar de forma manifiesta, con síntomas (presuntamente) sólidos de S.I.D.A., es preciso saber que se es seropositivo o, por lo menos, ¡tener temores fundados de serlo!
Hay que resaltar que, tanto en el primer caso como en este último (tras el diagnóstico de S.I.D.A., la asociación hecha por el entorno: es un homosexual o un depravado), ha existido una desvalorización de sí mismo y una osteolisis ósea. Los que especulan acerca del S.I.D.A. relacionan la cosa de la siguiente manera: la hematopoyesis ha resultado afectada (formación de glóbulos sanguíneos, principalmente en la médula roja ósea), ¡se trata por tanto de una enfermedad de inmunodeficiencia, de S.I.D.A.! Lo que sucede en realidad es que la desvalorización de sí mismo es la reacción más normal del mundo ante el hecho de ser considerado como un depravado, al que la sociedad proscribe y que, además, se encamina de lleno a una muerte inminente (¡completamente merecida!).
CONCLUSIÓN.
En el marco de los anteriores artículos publicados hasta el momento en raum&zeit sobre el tema del S.I.D.A., la mentira del S.I.D.A. ha sido ampliamente desenmascarada a nivel teórico. No es únicamente una mentira, es una estafa consciente y deliberadamente perpetrada para construir una posición de fuerza.
Yo consideré que mi misión consistía en examinar más de cerca el hecho -a decir verdad sobradamente conocido- de que únicamente manifiestan síntomas de S.I.D.A. aquellos que se saben seropositivos. En general, todos se limitan a darse por enterados del tema sin cuestionárselo. Y sin embargo, es ahí donde radica el nudo por deshacer para hacer estallar la impostura del S.I.D.A. Es preciso encontrar una respuesta a la pregunta de cómo se llegan a producir los síntomas que se atribuyen a S.I.D.A. y gracias a los cuales las personas pueden ser, y de hecho son, asesinadas.
Sólo la Ley de Hierro del Cáncer responde a esta pregunta, a partir del Sistema Ontogenético de los Tumores.
Los clínicos tienen por costumbre decir: Pero en fin, ¿de dónde proceden los síntomas? ¿De qué mueren los enfermos? La práctica de la eutanasia está generalizándose. ¡Y gracias a estos espeluznantes casos clínicos, la prensa impasible puede continuar celebrando este horrible fraude del S.I.D.A., potenciando el sacrificio de las víctimas!
Con todo mi respeto hacia las refutaciones teóricas de la superchería del S.I.D.A. (que fuí uno de los primeros en descubrir en 1987), creo que estamos en vías de desenmascarar el conjunto de esta impostura y sacar de sus casillas al sindicato del S.I.D.A. Este es, en efecto, el punto crucial que permite a cada paciente comprender perfectamente hasta dónde se intenta quebrantarlo. Es preciso explicar con precisión el mecanismo del S.I.D.A. Hacer que se comprenda como el choque psíquico provocado por los propios médicos, por su diagnóstico y pronóstico, genera los Focos de Hamer cerebrales y los síntomas, pretendidamente de S.I.D.A., en el órgano.
Son precisamente esos mismos científicos que rehusan hacer públicas las verdaderas relaciones de causa y efecto gobernadas por la Ley de Hierro del Cáncer, quiénes han creado la enfermedad de inmunodeficiencia que denominan S.I.D.A., y quiénes se apresuran ahora a redoblar el cáncer para conservar una segunda enfermedad obligatoriamente mortal que siga asegurándoles el poder.
Que los lectores me excusen, yo soy un hombre eminentemente práctico. Ciertamente es muy interesante discutir del S.I.D.A. manteniéndose en un plano teórico. Pero entre tanto, los infortunados continúan siendo aterrorizados con S.I.D.A., y son brutalmente asesinados siguiendo un esquema de S.I.D.A. Nuestras brillantes discusiones de salón no son ninguna ayuda para estos pobres seres. ¡Hemos de hacer algo! ¡Todos estamos invitados a movilizarnos, ¡todos somos responsables! ¡Levantémonos por fin, en nuestro país, y pongamos fin a esta tortura!.
Traducido de la publicación LE SIDA. A.S.A.C. - ASSOCIATION STOP AU CANCER. B.P. 134. 73001 CHAMBERY CEDEX (Estado francés).
http://www.free-news.org/hamer06.htm
Para quienes aun creen en esta patraña y se someten a las quimioterapias… os digo, el comportamiento de los microbios va consecuente con las temperaturas de nuestro cuerpo y estas temperaturas son reguladas por nuestra o conciencia. Es mi “singularidad” lo que determinara “como me siento” . “¿Frio”… ”caliente”…?.
Es la termodinamica lo que asentara las bases para conocer nuestro verdadero poder. La Medicina Cuantica aplicada nos descubre un abanico de esperanzas y posibilidades que se suceden para superar los conflictos…sigamos desde el diagnoistico hasta hoy, solo habéis sufrido y temido… Liberaos… tened fuerzas y agradeced, bendecid la vida y la salud…! Buscad dentro de vosotros mismos…! Si resolveis aquello que os hace sufrir(rencor, rabia, miedo, resentimiento, vergüenza…) la enfermedad, dejara de tener “sustrato”… El perdon os dara serenidad y con ella la paz, armonizareis vuestro microcosmos y colaborareis con el macro cosmos…!
Gracias por acompañarme en este viaje de EVOLUCION… con amor, alegria y armonia!
El viernes vimos el primer caso, del guarda bosques, veamos el segundo, reflexionemos, el cancer crece sospechosamente cada dia… el sida peligrosamente mas, las “pseudos investigaciones estan infladas, aumenta las estadisticas porque ya es innecesario muchas veces alguna prueba… basta que un paciente se haga reacio a cualquier tratamiento, haya creado anticuerpos contra este, sea neumonía, tbc, o hepatitis, para que sea incluido en el saco de los VIH positivos …!
Segundo caso.
Tras haberse sometido a una prueba voluntaria, un agente de seguros, compañero sin historia de una pareja homosexual, resulta ser seropositivo. ¡Su amigo era negativo! Hasta entonces todavía no había tropezado con un verdadero problema, el universo era para él un lugar tranquilo. Pero ese mismo día se sintió sepultado bajo una avalancha de conflictos. Fue ingresado allí mismo en la sección de aislamiento de un gran hospital. Nadie volvió a tocarle. Su amigo continuó con él durante los primeros momentos pero acabó abandonándole. Sabe muy bien en qué momento desarrolló un SDH: lo habían examinado de pies a cabeza con guantes aislantes, sin encontrarle nada.
Sin embargo, las pruebas detectaban que en su sangre existían anticuerpos anti-VIH, y que el resultado era positivo. Los dos médicos prosiguieron incansablemente sus exámenes. Finalmente, uno de ellos descubrió en la zona interna de la planta del pie derecho una mancha fungiforme, la señaló con el dedo con aire de entendido, y dijo:
- ¡Helo aquí, un sarcoma de Kaposi! Luego los dos doctores examinaron de nuevo a fondo su pene. En el tercer intento acabaron por encontrar una grieta minúscula, de entre uno y dos milímetros.
- ¡Ah!- exclamó el otro doctor- ¡ya ha alcanzado el pene!.
El paciente comentó que entonces se sintió caer en un pozo sin fondo, tenía la sensación de haber quedado apestado, de haberlo perdido todo, su profesión, sus amigos, el sentimiento de su valía. Se sentía particularmente desvalorizado en el plano sexual. A partir de ese momento, y a pesar de las radiaciones de cobalto a que le sometían contra los malvados virus VIH, fue desarrollando un melanoma a partir del pie derecho, síntoma de un conflicto de impurificación. Las manchas de melanoma azul oscuro hicieron también su aparición en el pene, cuello, y a continuación en el otro pie.
¿Estaban pues en lo cierto los médicos? Al contrario, lo que hicieron fue precipitar a este hombre, perfectamente sano, hacia un conflicto de impureza, tal como se puede constatar en el escáner cerebral sobre el corte de su cerebelo (todavía activo). Al mismo tiempo y tras su Síndrome Dirk Hamer, el paciente experimentaba una impotencia cada vez más pronunciada. Todos los carcinomas que fueron sucesivamente haciendo su aparición -el melanoma generalizado, las metástasis óseas, las metástasis de cáncer bronquial, correspondientes a los conflictos ad hoc, iban siendo catalogados como metástasis cancerosas del S.I.D.A.-. Finalmente le informaron de que ya no había terapia para él y lo enviaron a su casa, a morir.
Perdió peso rápidamente y fue víctima de un pánico total.
Aparentemente tenía vida para tan solo unas semanas. Fue entonces cuando -justo a tiempo, por lo que parece- recibió mi libro Fundamento de una Nueva Medicina. Descubrió que el SIDA. es la mayor estafa del siglo, lo que le pareció plausible, claro y evidente. Desde entonces empezó de nuevo a comer, duerme, ha engordado de nuevo y el melanoma ha dejado de extenderse. Tengo esperanzas de que lo supere, y si lo consigue, los demás podrán tener la seguridad de que realmente es la estafa más grande del siglo.
El paciente hubiera enfermado por igual -según la Ley de Hierro del Cáncer- tanto si el test hubiera dado por error un resultado falsamente positivo, como si realmente lo fuera. Lo que cuenta es que él creyó que era grave y mortal, sólo eso cuenta.
Si el paciente no se hubiera sometido voluntariamente a la prueba del S.I.D.A., no le hubiera pasado nada en veinte años, ya que por aquel entonces gozaba de una salud perfecta. Esto es algo que se corresponde con exactitud a todas las observaciones que llevan efectuadas los investigadores: para enfermar de forma manifiesta, con síntomas (presuntamente) sólidos de S.I.D.A., es preciso saber que se es seropositivo o, por lo menos, ¡tener temores fundados de serlo!
Hay que resaltar que, tanto en el primer caso como en este último (tras el diagnóstico de S.I.D.A., la asociación hecha por el entorno: es un homosexual o un depravado), ha existido una desvalorización de sí mismo y una osteolisis ósea. Los que especulan acerca del S.I.D.A. relacionan la cosa de la siguiente manera: la hematopoyesis ha resultado afectada (formación de glóbulos sanguíneos, principalmente en la médula roja ósea), ¡se trata por tanto de una enfermedad de inmunodeficiencia, de S.I.D.A.! Lo que sucede en realidad es que la desvalorización de sí mismo es la reacción más normal del mundo ante el hecho de ser considerado como un depravado, al que la sociedad proscribe y que, además, se encamina de lleno a una muerte inminente (¡completamente merecida!).
CONCLUSIÓN.
En el marco de los anteriores artículos publicados hasta el momento en raum&zeit sobre el tema del S.I.D.A., la mentira del S.I.D.A. ha sido ampliamente desenmascarada a nivel teórico. No es únicamente una mentira, es una estafa consciente y deliberadamente perpetrada para construir una posición de fuerza.
Yo consideré que mi misión consistía en examinar más de cerca el hecho -a decir verdad sobradamente conocido- de que únicamente manifiestan síntomas de S.I.D.A. aquellos que se saben seropositivos. En general, todos se limitan a darse por enterados del tema sin cuestionárselo. Y sin embargo, es ahí donde radica el nudo por deshacer para hacer estallar la impostura del S.I.D.A. Es preciso encontrar una respuesta a la pregunta de cómo se llegan a producir los síntomas que se atribuyen a S.I.D.A. y gracias a los cuales las personas pueden ser, y de hecho son, asesinadas.
Sólo la Ley de Hierro del Cáncer responde a esta pregunta, a partir del Sistema Ontogenético de los Tumores.
Los clínicos tienen por costumbre decir: Pero en fin, ¿de dónde proceden los síntomas? ¿De qué mueren los enfermos? La práctica de la eutanasia está generalizándose. ¡Y gracias a estos espeluznantes casos clínicos, la prensa impasible puede continuar celebrando este horrible fraude del S.I.D.A., potenciando el sacrificio de las víctimas!
Con todo mi respeto hacia las refutaciones teóricas de la superchería del S.I.D.A. (que fuí uno de los primeros en descubrir en 1987), creo que estamos en vías de desenmascarar el conjunto de esta impostura y sacar de sus casillas al sindicato del S.I.D.A. Este es, en efecto, el punto crucial que permite a cada paciente comprender perfectamente hasta dónde se intenta quebrantarlo. Es preciso explicar con precisión el mecanismo del S.I.D.A. Hacer que se comprenda como el choque psíquico provocado por los propios médicos, por su diagnóstico y pronóstico, genera los Focos de Hamer cerebrales y los síntomas, pretendidamente de S.I.D.A., en el órgano.
Son precisamente esos mismos científicos que rehusan hacer públicas las verdaderas relaciones de causa y efecto gobernadas por la Ley de Hierro del Cáncer, quiénes han creado la enfermedad de inmunodeficiencia que denominan S.I.D.A., y quiénes se apresuran ahora a redoblar el cáncer para conservar una segunda enfermedad obligatoriamente mortal que siga asegurándoles el poder.
Que los lectores me excusen, yo soy un hombre eminentemente práctico. Ciertamente es muy interesante discutir del S.I.D.A. manteniéndose en un plano teórico. Pero entre tanto, los infortunados continúan siendo aterrorizados con S.I.D.A., y son brutalmente asesinados siguiendo un esquema de S.I.D.A. Nuestras brillantes discusiones de salón no son ninguna ayuda para estos pobres seres. ¡Hemos de hacer algo! ¡Todos estamos invitados a movilizarnos, ¡todos somos responsables! ¡Levantémonos por fin, en nuestro país, y pongamos fin a esta tortura!.
Traducido de la publicación LE SIDA. A.S.A.C. - ASSOCIATION STOP AU CANCER. B.P. 134. 73001 CHAMBERY CEDEX (Estado francés).
http://www.free-news.org/hamer06.htm
Para quienes aun creen en esta patraña y se someten a las quimioterapias… os digo, el comportamiento de los microbios va consecuente con las temperaturas de nuestro cuerpo y estas temperaturas son reguladas por nuestra o conciencia. Es mi “singularidad” lo que determinara “como me siento” . “¿Frio”… ”caliente”…?.
Es la termodinamica lo que asentara las bases para conocer nuestro verdadero poder. La Medicina Cuantica aplicada nos descubre un abanico de esperanzas y posibilidades que se suceden para superar los conflictos…sigamos desde el diagnoistico hasta hoy, solo habéis sufrido y temido… Liberaos… tened fuerzas y agradeced, bendecid la vida y la salud…! Buscad dentro de vosotros mismos…! Si resolveis aquello que os hace sufrir(rencor, rabia, miedo, resentimiento, vergüenza…) la enfermedad, dejara de tener “sustrato”… El perdon os dara serenidad y con ella la paz, armonizareis vuestro microcosmos y colaborareis con el macro cosmos…!
Gracias por acompañarme en este viaje de EVOLUCION… con amor, alegria y armonia!